Ensayo sobre Eón

En este breve relato, se presenta un ensayo elaborado por un estudiante sobre la historia conocida del continente de Eón.

El texto se desarrolla como un trabajo académico, en el que el estudiante recopila y analiza información de diversas fuentes sobre las distintas razas que habitan Eón, así como su origen y desarrollo a lo largo del tiempo.

Resumen:

El continente de Eón, considerado el centro de la Creación del mundo de Avikt, está habitado por diversas razas, incluyendo sináis, heldas, daraides, agondrals, santras, naredes y humanos. Según las historias, estas razas fueron creadas por los Seres Celestiales, cada uno asociado a un elemento: fuego, tierra, aire, agua, luz y vacío. Los sináis, los más antiguos, custodian la Isla de la Creación, mientras que los humanos, la raza más joven, se han expandido por todo el continente tras la Gran Guerra del Vacío.

La historia reciente de Eón se divide en tres edades de los humanos. En la Primera Edad, conocida como la Edad de la Llama Perpetua, los humanos fueron creados, pero su existencia fue marcada por la lucha entre Érebo, el Ser Celestial del Vacío, y Leukós, el Ser Celestial de la Luz. Érebo desató la Gran Guerra para intentar controlar la Llama Eterna. La guerra terminó con la derrota de Érebo y la muerte de varios Seres Celestiales.

La Segunda Edad, llamada la Edad Oscura, fue un periodo de expansión humana, mientras que las razas antiguas se retiraban a sus territorios. Los humanos tomaron el control de las ruinas de otras razas y enfrentaron la aparición de seres oscuros, usando la magia elemental heredada de los Seres Celestiales para combatirlos. En esta época se fundaron los primeros reinos humanos, que se consolidaron hacia el final de la edad.

Finalmente, en la Tercera Edad, los humanos se convirtieron en la raza dominante de Eón, tras establecer tratados que definieron los cinco principales países. Las otras razas, aunque disminuidas, se adaptaron a su nueva realidad en un mundo liderado por los humanos.